En una reunión de casi media hora, agendaron los riesgos y el uso ético de esta tecnología.
«En las manos equivocadas, todo instrumento puede convertirse en un arma», advirtió el presidente de Microsoft en su encuentro con el papa Francisco.
El presidente de Microsoft, Brad Smith, se reunió este miércoles con el papa Francisco para discutir el uso ético de la inteligencia artificial (IA) y formas para cerrar la brecha digital entre países ricos y pobres con ocasión de la reunión sobre roboética que prepara el Vaticano.
Por alrededor de 30 minutos el empresario y el religioso hablaron en la residencia del Pontífice. Ambos discutieron «la inteligencia artificial al servicio del bien común y las actividades que apuntan a reducir la brecha digital que aún persiste a nivel global», según un comunicado.
«En las manos equivocadas, todo instrumento puede convertirse en un arma», reconoció Smith. Por su parte, el papa Francisco instó a los líderes mundiales a garantizar que la IA «ayude a servir a la humanidad y proteja nuestra casa común en lugar de lo contrario».
En las manos equivocadas, todo instrumento puede convertirse en un arma
Así mismo, el Vaticano dijo que su Pontificia Academia para la Vida patrocinaría conjuntamente un premio con Microsoft para la mejor disertación doctoral en 2019 sobre el tema «inteligencia artificial al servicio de la vida humana».
TECNÓSFERA
*Con agencias
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