Tres elecciones generales en cuatro años y cinco urnas para la primavera electoral de 2019

Los españoles fueron llamados a las urnas en diciembre de 2015 y junio de 2016 y votarán el próximo 28 de abril
Los pactos decidirán, salvo sorpresa, al próximo inquilino de La Moncloa en un escenario de crispación total

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Miembros de una mesa electoral durante el recuento de votos en las elecciones de 2016

EFE

En una situación inédita y sin precedentes en España, los ciudadanos han sido llamados a las urnas para unas elecciones generales tres veces en tan solo cuatro años. El 20 de diciembre de 2015 votaron y tras la falta de acuerdo entre las fuerzas políticas para formar Gobierno, se repitieron las elecciones el 26 de junio de 2016, tras las que fue investido Mariano Rajoy. La moción de censura de junio de 2018 sacó al expresidente del PP de La Moncloa y llevó al Gobierno a Pedro Sánchez que, ocho meses después, se ve obligado a convocar elecciones generales al no tener Presupuestos para 2019.

Solo en este año, en un periodo de apenas dos meses, los ciudadanos votarán en cinco urnas: El 28 de abril elegirán a sus representantes en el Congreso de los Diputados y en el Senado; y el 26 de mayo decidirán quién es su alcalde o alcaldesa en más de 8.000 municipios de España, además de a sus presidentes autonómicos en todas las comunidades, menos en Andalucía, Cataluña, Galicia y País Vasco; y a los 54 diputados españoles en el Parlamento europeo.

La primavera política será de infarto. La campaña de las municipales, autonómicas y europeas comenzará tan solo tres semanas después de las celebración de las generales. Es posible que en medio de las negociaciones para formar Gobierno arranque la segunda campaña del año.

La reconfiguración del mapa político en España será, por tanto, total y tocará desde la administración más cercana al ciudadano- la local- a la europea.

Salvo sorpresa mayúscula, los pactos decidirán el inquilino de La Moncloa

La previsible fragmentación de los diferentes parlamentos, en tiempos de muerte del bipartidismo, puede llevar, además, a repetición de elecciones a todos los niveles. Salvo sorpresa mayúscula, los pactos electorales decidirán el nombre del próximo inquilino de La Moncloa en un momento de polarización absoluta y crispación total.

Las declaraciones de los diferentes líderes políticos, que desde ya llevan puestos el traje de candidato, hacen presagiar una campaña de bloques contra bloques y a cara de perro.

Nada más convocar elecciones, Sánchez llamó a votar "frente a la foto de Colón" y frente a las "tres derechas", en referencia a PP, Ciudadanos y Vox; mientras que Pablo Casado y Albert Rivera piden exactamente lo contrario: evitar que Sánchez "reedite" un " pacto con los independentistas". Los dos líderes del centro derecha miran a Andalucía, donde el PP gobierna con Cs gracias al apoyo de Vox, para repetir alianzas en el ámbito nacional.

PSOE y Podemos han cerrado su etapa de trincheras y en los ocho meses de Gobierno de Sánchez su relación se ha caracterizado por la colaboración. Ambas formaciones insisten en establecer un cordón sanitario a Vox pero, de momento, Cs impone dicho cordón contra el propio Sánchez.

A juzgar por las declaraciones de los candidatos, ambos 'frentes' apelarán al miedo del otro– los de centro derecha alertarán sobre un PSOE y un Podemos que vincularán con los soberanistas-; y el bloque de la izquierda pondrá el énfasis en la carta de naturaleza que, dicen, PP y Cs ha otorgado a la ultraderecha en España. Dentro de cada bloque cada uno apelará- es un clásico- al voto útil para apelar al votante en un año en el que la proliferación de comicios podría influir en la participación.

Los independentistas podrían de nuevo tener la llave

Los independentistas podrían ser claves, otra vez, para decidir el Gobierno de España. Sánchez no quiso mojarse este viernes ante la pregunta de si aceptaría los votos del PDeCAT y de ERC para volver a La Moncloa.

El PNV es un clásico entre los partidos que 'ponen y quitan' Gobiernos, habiendo facilitado a lo largo de la historia Gobiernos 'populares' y socialistas.

Cataluña se configura como uno de los principales- si no el principal- asuntos de los que se hablará en esta precampaña y campaña electoral con el juicio del 'procés' que seguirá su curso en plena campaña.